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El juego en el que tú y tu pareja
os (re)descubriréis, os veréis
y os sentiréis más cerca

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Venta exclusiva desde esta página.
Temporalmente agotado. Disponible próximamente (finales de marzo-principios de abril). Déjanos un mensaje si quieres que te avisemos cuando vuelva a estar disponible.

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Más de 200 cartas y mucho por compartir

El juego cuenta con más de 200 cartas.

¿El objetivo? Que uséis cada una de las cartas como una invitación a iniciar

una conversación en la que compartáis  un rinconcito de vuestro mundo interno. 

La baraja se distribuye en siete familias distintas:

(Re)conociendo nuestro mundo interno

 

Incluso cuando sentimos que nos conocemos, podemos beneficiarnos del ejercicio de mirarnos con apertura y curiosidad, explorando el mundo interno de nuestra pareja, y permitiendo a nuestra pareja que explore el nuestro.

 

Vernos y sentirnos vistos es importante. Esta familia de cartas os invitará a iniciar conversaciones sobre aquello que creéis saber, pero que probablemente no hayáis explicitado, creando nuevas oportunidades para conoceros.

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Divirtámonos curioseando

 

No todo van a ser preguntas serias y profundas ;) También es importante que haya espacio para lo no importante, lo banal y lo que, más que interesante, resulta curioso.

 

Estas cartas contribuyen a rebajar el nivel de emocionalidad del juego invitándoos a iniciar conversaciones distendidas, curiosas y, quién sabe si también divertidas.

Construyendo un nosotros

 

Las relaciones sanas no suceden, se construyen. Y parte de ese trabajo gira en torno a co-crear un nosotros.

 

Conocernos en términos de emociones y necesidades afectivas nos ayudará a sentirnos más cerca.

 

También lo hará el trabajar para convertirnos en un refugio seguro para el otro. Esta familia os ayudará a afianzar el vínculo desde la intimidad emocional.

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Nuestra historia

 

Recordar esas situaciones que nos emocionaron, aquellas gracias a las cuales crecimos como pareja, aquellas que recordamos con alegría y aquellas que mantuvieron vivo al vínculo pueden contribuir a afianzarlo. 

 

Además, recordar nuestros inicios puede ayudarnos a conectar con esas sensaciones de las que suelen acompañarse la etapa inicial de las relaciones y que, con el paso del tiempo, van quedando atrás.

Mirando al futuro

 

¿Qué sueños nos quedan por cumplir? ¿Dónde nos vemos en unos años? ¿A qué nos gustaría destinar más tiempo? ¿Podríamos añadir más diversión y aventura a la relación?

Construir un futuro a medida, escogiendo de forma consciente, contribuyendo al crecimiento individual a la vez que fortalecemos el vínculo es clave para que los proyectos en común (también los que parecen insignificantes), puedan hacer bien al vínculo y contribuir a nuestro bienestar.

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Manteniendo viva la llama

 

La intimidad física se construye tanto en la cama como fuera de ella. De hecho, lo que podemos trabajar fuera de ella puede resultar muy interesante para mantener viva la llama.

Hablar de sexo con nuestra pareja, desde la curiosidad, desde el explorar juntos y desde el descubrir(nos) en el terreno sexual (y sensual) contribuye a sentirnos más cerca a la vez que reconectamos con la chispa. 

Propuestas de conexión

 

Esta familia de cartas es distinta a las anteriores: en ellas encontrarás propuestas de conexión; pequeñas acciones que enriquecerán vuestras interacciones del día a día.

No hacen falta grandes gestos para demostrarnos que nos queremos, que nos importamos y que estamos ahí para el otro. Pero, a veces, lo pequeño, nos pasa desapercibido. Os doy algunas ideas simples para que cuando os toque una de estas cartas las guardéis y las uséis durante los días siguientes.

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Completa la frase

 

En esta familia encontraréis frases por completar con aquello primero que os venga a la cabeza: «Hace tiempo que quiero decirte que…», «Siento gratitud por...», «Quiero aprender a...», «Algo que me enorgullece y que hace pensar en ti y en mí como un equipo es...».

Recordad que la idea no es solamente responder a las preguntas ―completar las frases, en este caso―, sino usarlas como invitación a iniciar una conversación :)

¿Cómo se juega?

1.  Mezcla la baraja

2.  Saca una carta al azar

3.  Léela en voz baja. Si te sientes cómodo/a con la pregunta, formúlala en voz alta

4.  Deja espacio a tu pareja para responderla, recógela desde la curiosidad y con una actitud libre de juicio

5.  Pasa el turno de tu pareja

Nota: en el caso de las Propuestas de conexión, guardaos la carta a mano, fuera de la baraja, para tenerla presente los días siguientes.

Recomendaciones

1. Evitad las respuestas monosilábicas.

2 .Usad las preguntas como una invitación a iniciar una conversación, más que como un interrogante al que dar respuesta.

3. Escuchad a vuestra pareja con atención y de forma activa. Es importante que ambas partes os sintáis vistas.

4. Adoptad una posición de aceptación, compasión y apertura hacia las respuestas de la otra parte.

Bonus track

Si queréis elevar el nivel de complejidad, podéis probar de adivinar cuál va a ser la respuesta de la otra parte. Eso sí, procurad que el juego no se convierta en un examen para evaluar quién conoce mejor al otro ;)

Nota: será posible en casi todas las cartas, menos en aquellas que pertenecen a la familia Propuestas de conexión.

Cada carta es una invitación a vernos, seguir explorando nuestro mundo interno, compartir lo que nos apetezca con nuestra pareja 

y, así, sentirnos más cerca

En el día a día hay muchas cosas por hacer y poco espacio para sentir y conectar. Como consecuencia, es posible que nos veamos poco, a pesar de que interactuemos mucho. Más cerca es una invitación a pararnos, a escucharnos con todos los sentidos.

El objetivo de este juego es que destinéis tiempo a tener conversaciones significativas sobre vosotros como pareja, y sobre vosotros como personas con inquietudes, con historias, con miedos, con curiosidades por descubrir... Que os conozcáis mejor y, con ello, que os sintáis más cerca, más conectados.

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