top of page
  • Foto del escritorMontse

Quiero que me quieras: quiéreme, por favor

Actualizado: 21 ago 2020

Cuando nuestra autoestima no está en plena forma, cuando no nos queremos lo suficiente, buscamos compensar la falta de amor (propio) con amor ajeno. Intentamos obtener del exterior lo que, en realidad, deberíamos ser capaces de proporcionarnos nosotros mismos. En otras palabras: delegamos en los demás el valorarnos, el respetarnos, el sentirnos capaces, el querernos.


Al depositar en los demás nuestro sentido de valía y la estima propia, permitimos que sean los demás quienes decidan si somos valiosos, si somos respetables y si somos capaces. En definitiva, permitimos que sean los demás quienes estimen si somos "dignos de ser queridos". Y no solamente eso, sino que también delegamos en los demás el definir cómo de valiosos, respetables y capaces somos. Les damos a los demás licencia para establecer cuánto valemos y, por lo tanto, cuánto debemos querernos. ¿Imagináis lo que sucede? Todas nuestras acciones girarán alrededor de hacer que los demás nos quieran; como si tuviéramos que esforzarnos; porque como nos queremos poco, tenemos que sembrar ese amor que nos falta, y regarlo, y que crezca en mente ajena.


Si nos queremos poco y dejamos que sean los demás quienes definan cuánto debemos querernos, seguramente lo hagamos desde un tono más bien pasivo, haciendo concesiones que, de considerar que valemos y que merecemos ser respetados, no lo haríamos.

Como consecuencia, nos dan por sentado; valoran nuestras opiniones y nuestras acciones más bien poco, porque no nos hacemos valer; porque no tenemos precio: hagan lo que hagan, digan lo que digan, nos traten como nos traten; consiguen lo mismo de nosotros, justamente porque a través de nuestras acciones, de nuestras palabras amables y de la ausencia de límites se esconde un "por favor, quiéreme". Porque si los demás nos quieren, sabemos que valemos, que somos merecedores de respeto, que nos proyectamos como personas capaces. Si los demás nos quieren, nos damos permiso para querernos.




297 visualizaciones0 comentarios
bottom of page