Tenemos temporadas en las que avanzamos mucho, y otras en las que nos sentimos más bien estancados. Y no me refiero necesariamente a objetivos tangibles, sino a nuestro crecimiento y desarrollo personal, a nuestro INTROYECTO; aquello en lo que todas y todos queremos trabajar pero que fácilmente relegamos a un segundo o tercerísimo plano.
Sabemos que debemos ponernos en primer lugar, pero la realidad es que todo pasa por delante nuestro. Justamente porque la teoría la sabemos, pero la práctica... ¡Ay, la práctica! 😉
Os proponga 3 niveles:
1️⃣ Reflexionar. Literalmente, pararte a pensar en ti. Reflexionar sobre lo que piensas, lo que haces, lo que dices, quién eres, tus valores, tus metas, tus intereses... Los posts que publico pueden ayudarte al respecto: léelos de forma verdaderamente activa, prestando atención, de forma muy consciente. ¡Estoy segura de que hacerlo puede marcar la diferencia!
2️⃣ Hacerte preguntas. Pero no cualquier pregunta vale; deben ser preguntas que te ayuden a crecer, a ver las cosas de forma distinta (potencialmente más sana), a cambiar el «chip», a pensar y a actuar de tal manera que tú misma o tú mismo te sumes... y no te restes o no te limites(!!).
Eso es justamente lo que tenía en mente cuando escribí mi libro «Quiérte Más y Mejor»📚, y me llena de orgullo y satisfacción saber, gracias a vuestros comentarios y testimonios, que verdaderamente lo consigue.
3️⃣ Aprender. Estrategias, técnicas, nuevas formas de pensar, de actuar, de sentir, de razonar... para que lo que trabajas hoy te acompañe durante el mayor tiempo posible, marcando un antes y un después, formando parte de un «nuevo Yo». Y esto es lo que propongo en las sesiones individuales.
Escoged el nivel que consideréis que se ajusta mejor a lo que buscáis o necesitáis en vuestra situación actual. Pero, sobre todo, ¡escoged uno!
Tu crecimiento puede esperar... ¡cierto! Pero, como dice esa frase tan conocida: dentro de un año desearás haber empezado hoy... con tu INTROYECTO.
Comments